1. Asegúrale a la víctima que el acoso no es su culpa.
Como colega, debes reconocer que la víctima de acoso ha confiado en ti con una experiencia difícil que ha tenido un efecto negativo en su lugar de trabajo. Experimentar una situación de acoso en el lugar de trabajo puede ser altamente personal y doloroso y, dar un paso para compartir esa historia requiere valentía y asumir un riesgo. Creerle en vez de culparle o dudar de sus acciones o experiencia.
2. Mantén la confidencialidad de la mejor manera posible.
Como colega, probablemente estés fuera de la jerarquía formal de denuncia de acoso en el lugar de trabajo. Además, es posible que la víctima se haya acercado a ti con la intención de mantener la confidencialidad, ya que contárselo a un supervisor o a un funcionario de recursos humanos (HR, por sus siglas en inglés) podría ocasionar una situación incómoda o desencadenar una investigación. Asegúrate de mantener esta confidencialidad al no discutir los acontecimientos adversos en público ni con supervisores, sin el consentimiento explícito de la víctima.
3. Ofrece ayudarle a documentar el acoso o a actuar como testigo, si es necesario.
Si la víctima decide continuar con una queja formal en el futuro, necesitará documentación clara de los detalles de lo que sucedió, la fecha, la hora, el lugar y cualquier testigo presente. Si la víctima se ha acercado a ti de forma confidencial, aliéntala a que documente el acontecimiento adverso y ofrécele servir como testigo. Además, alienta a la víctima a que guarde esta prueba en algún lugar seguro fuera del lugar de trabajo, en caso de que se confisquen las computadoras de trabajo o que se inspeccionen las áreas de trabajo. Por último, la decisión de documentar el acoso y presentar una queja formal es solamente de la víctima—como colega, puedes ofrecerle apoyo personal e información sobre cómo hacerlo de forma segura para que tenga todas las opciones disponibles de respuesta en el futuro.
4. Si la víctima decide confrontar al acosador, ofrece acompañarle.
La víctima puede decidir que es seguro confrontar al acosador sobre la conducta inapropiada y pedirle que pare. Como colega, puedes ofrecer acompañarle como apoyo adicional y como testigo, si la persona está nerviosa sobre la confrontación. Recuerda permitir que la víctima tome el liderazgo en esta toma de decisiones; la víctima sabe lo que le hará sentir más segura en el lugar de trabajo y tú estás ahí para apoyar sus decisiones.
5. Edúcate sobre la prevalencia y las dinámicas del acoso en el lugar de trabajo.
Si esta es tu primera vez escuchando o pensando críticamente sobre un acontecimiento de acoso sexual, es importante que te eduques sobre las dinámicas complejas de poder y de control que están en juego. Puedes usar recursos como los “Datos sobre la violencia de género en el lugar de trabajo” y “Los efectos de la violencia en las comunidades del lugar de trabajo” para entender mejor la naturaleza y los efectos del acoso y así convertirte en un mejor aliado en el lugar de trabajo.
6. Identifica y proporciona una remisión a grupos locales de defensoría y apoyo.
La mayoría de las comunidades tiene defensores, consejeros, abogados y líderes religiosos que pueden apoyar a la víctima directamente a medida que navegan los efectos duraderos del acoso en el lugar de trabajo. Estos recursos pueden incluir líneas nacionales de ayuda, como la Línea de Ayuda Nacional de Asalto Sexual, como también otros grupos locales de apoyo legal y defensoría. Ten disponible una lista de estos recursos para referir a la víctima si lo solicita, y asegúrate de tomar pasos que mantengan la confidencialidad y los deseos de la víctima durante todo el proceso.
7. Revisa las políticas y los protocolos internos del lugar de trabajo.
Consulta la política de acoso sexual de tu empleador para ver cuáles son los procedimientos para denunciar la mala conducta. Si tu empleador no tiene una política, habla con la gerencia o con recursos humanos sobre cómo crear una. Puedes usar este modelo de política para construir una que aborde el acoso sexual en tu lugar de trabajo. En general, la política del lugar de trabajo debe definir el acoso sexual y la mala conducta, tener pasos para denunciar el acoso, detalles sobre los procesos de investigación y protecciones de represalias en contra de aquellos que denuncian el acoso.
8. Sé un simpatizante.
Si el acoso sucede frente a ti, elige ser un simpatizante en vez de un espectador. Usa las cinco D (Distrae, Delega, Documenta, Demora, y Dirige), como lo describe el “¡Hollaback! Capacitación de intervención para testigos” para detener el acoso sexual y apoya a la víctima siempre que sea seguro hacerlo. Solicita este tipo de capacitación para simpatizantes en tu lugar de trabajo con el fin de preparar a otros colegas a la hora de responder ante acontecimientos de acoso sexual.
9. Habla con la víctima, libre de prejuicios.
Puedes continuar siendo un recurso para la víctima preguntándole cómo está de una forma segura, y sin prejuicios personales sobre sus acciones o decisiones. Como su colega, tu meta es escucharle, proporcionarle recursos y apoyo si te lo pide, y ayudarle a crear un entorno laboral respetuoso en la medida de lo posible.
10. Sé amable contigo.
Apoyar a una víctima en su experiencia con el acoso puede ser difícil emocional y físicamente para ti como colega, especialmente si tú has tenido experiencias de acoso en el pasado. Comunícate con líneas de ayuda y defensores locales para encontrar apoyo para ti y revisa estos consejos útiles para el autocuidado.